[] Fractario-Re: diciembre 2007

sábado, 29 de diciembre de 2007

(Primer Blues) Una parada para resguardarse

Una camioneta negra noche corre a velocidad alta por un sendero de mi ciudad, un boulevard lleno de tráfico, la gente se asoma a la esquina, las paradas continuas nunca han sido parte de mi predilección, sin embargo decido hacerlas, me detengo en las esquinas a mirar a la gente, a mirarme, mirarte en cada paso desaparecido de tu ausencia; camino en un ritmo blues, sereno pero muy azul, la camioneta negra que corre a alta velocidad, insisto,la velocidad y un paso lento; me hacen pensar en el tren de tu recuerdo, esos jalones a través de tus largas vías, tus caminos a veces indescifrables que por momentos son imposibles de andar. Miro alrededor y fijo la mirada en una esquina de luces blancas, desde esta esquina vacía miro la camioneta estrellarse al semáforo, mi blues se ha recortado en el solo justo en el momento del choque, pienso en la relación cifrada entre tu recuerdo, el choque y mi blues, la velocidad y mi paso lento para llegar a la esquina del resguardo, ahora pongo play al reproductor, de nueva cuenta una canción para andar por las vías.

take five

Uno de los guitarristas más importantes en la escena del jazz, grabó su primer álbum a la edad de 21 años, "The new Boss Guitar", junto al magnífico organista Jack McDuff. Ha tenido diferentes momentos en su carrera, la primera como cantante Little Georgie Benson; un pop star de los años 80; Rhythm and blues y rock en su juventud, además de su etapa Funky junto a McDuff. Su mano izquierda tiene un sonido claro llena de swing, otra característica es el simultáneo canto al lado de la guitarra.

Notas

He aprendido que el camino más recto es el labertinto.
Crhistoph Hein

No le doy ningún valor a mi vida, sólo a las vidas ajenas, y pese a ello amo la vida, pero la amo porque espero que me dé alguna ocasión para echarla decorosamente por la borda.
Enrique Vila Matas

Es cierto que a veces la verdad suena casi convincente.
Christoph Hein

Continúo mi camino,
que es un paso más allá
y a casa; y sin hacer ruido,
aparte me quedo ya.
Robert Walser

Hay hombres sobrios y aplomados, a los que la desgracia los quiebra por adentro, sin que se vea.
Ricardo Piglia

No hay que temerle a la felicidad: pues no existe.
Michel Houellebecq

Requiem

Y vi también una niña bellísima con un globo azul y rojo
y un traje adornado con faralaes,
y verla me trajo lentamente
la dolorosa memoria de mi hija Nora.

Enrique Vila Matas


Y ahí estaba, sentada frente a la computadora, pálida inmóvil. Su recuerdo en las manos a punto de tirar todo por la borda, su tristeza en cada rincón de la alcoba.

A veces las noticias llegan sólo así, inesperadas, yo no sabía qué sentir, creía que era lo mejor, pero uno no sabe, nunca se sabe qué es lo mejor para lo demás, ese tipo cosas están fuera del alcance de la gente. Quizá ahora pensaba eso porque no podía hacer mucho. El aviso de su llegada me había tomado por sorpresa, no son esos momentos que uno espera, sí, yo decía eso, no así.

Una mañana había decidido dejarlo, estaba de pie mirando a su alrededor, su microcosmos inmediato, no tenía claro absolutamente nada, pero aún así decidió salir, tomar el camión que lo llevaría a alguna parte y subirse, ese placer de perderse no sólo en el espacio que habita sino más bien perderse en su memoria, en el tiempo.

La vi una sola vez, no pudimos conocernos, creo que nunca supo de mí en su vida, ese tipo de apariciones repentinas, creo o imagino solamente que, en el fondo tenía una tentativa suicida, un cierto agobio de identidad, y se fue sin decir nada, como muchas personas ya lo habían hecho, como yo lo hice algún día, sólo partí...

viernes, 28 de diciembre de 2007

Stanley Jordan

Golpes, golpes de la delicada armonía

La manera de tocar de este guitarrista, más que pulsar, golpea el mástil, las cuerdas con sus diez dedos. Esta aproximación pianística, recuerda al desaparecido Hendrix y algunos otros guitarristas como Van Halen, pero en un contexto jazzístico nos da como resultado cualquier posibilidad amónica, sin renunciar a la expresividad de la guitarra eléctrica. Stanley Jordan fue un músico callejero, primero en Chicago y después en New York, a los 11 años abandonó el piano clásico a partir de escuchar la música de Hendrix. Sus primeros triunfos fueron precisamente en festivales, New York y Montreux en 1984. Su primer disco se grabó bajo el sello importantísimo que además resurgió con éste, BLue Note.

jueves, 27 de diciembre de 2007

La estructura duele, dejemos al tiempo improvizar

Nadie escucho con mayor provecho que Debussy,
los arpegios que las manos traslúcidas de la lluvia
improvisan contra el teclado de las persianas.
Oliverio Girondo

Más allá de la ventana las hojas sueltas flotan con la ayuda del viento, que empuja con sonidos ligeros el camino rojo del otoño. De este lado, mi cuarto lleno de reflejos botados: notas aisladas, que errantes suenan, alguno que otro solo valioso a veces se presenta. En realidad el tiempo ya no me importa, las diez, las once con quince, nada revela; sólo lo utilizo como metrónomo en las noches de encuentro. Eres tan azul, tan improvisada, sencillamente sincopada. Te miro en diapasón, deslizándote entre sostenidos y caminando por la delicada blue note. Suena la guitarra de Metheny, No matter what. Caminas como musa entre octavas y quintas y sueños y … vibro con tu canto suave, de pronto quiero escapar, salir. Me arrastras. Improviso en el momento en que me enredas en tu niebla. Nos miramos… De pronto tu sexo está en mi boca, frágil, sutil al tacto de mis labios. Mi lengua libera algunos ritmos de estructuras cerradas. Haces fluir el sonido con cada roce de tu piel, estremeciendo esta guitarra que se desgarra con notas sueltas, tu aroma canela que está en cada armónico de la pieza de madera, el dulce y la madera fusionados esta noche; se han olvidado completamente de la estructura.El metrónomo se detiene, el tiempo en off. ¿Eran mis manos que acariciaban tu cuerpo o tu cuerpo se desdobla en partituras juguetonas llenas de espacios en blanco? La guitarra calla y tú no suenas más. Estoy cansado y confundido por tu aparición entre mis manos. Nace un lugar establecido para el silencio. Sólo se percibe la monótona estructura lied alemana de cualquier reloj suizo: tic tac, tic tac, tic, tac, tic tac, que ahora también se ha detenido. Quizá sea el momento para escribir este solo sincopado de deseos, o escuchar cómo corres por el viento detrás de la ventana.…

y sin tenerte,te tengo a vos
y tengo a mi guitarra
Jorge Drexler

How to disappear completaly

I
Lápiz y café sobre el escritorio.
II
Desaparecer, desaparecer, pensaba Doris mientras tomaba una taza de café.
III
La historia es sencilla: una serie de escritores había creado algo parecido a un manifiesto, en el que la propuesta era la desaparición, algo frecuentemente relacionado a la escritura mínima, la poesía hecha con lápiz. Robert Walser era uno de los primeros que había intentado
esconderse de la vida, solía hacer largos recorridos por las mañanas en el jardín del Sanatorio de Herisau, pisaba la nieve que de vez en vez le enfriaba los dedos de los pies, un sentimiento de frialdad se paseaba por su cuerpo todas las mañanas de Diciembre y pensaba "mi cuerpo estaría en total calma, si se quedara frío e inmóvil". Walser fue el que iniciaría la desaparición en el grupo de escritores, sus textos se volvían cada vez más y más helados, mínimos.
IV
Doris toma la más reciente publicación de sus poemas, serie infinita de pequeños micro-relatos volando por la alcoba. Doris sentada en el sillón, juega con diminutos fragmentos negros,mira su imagen en un largo espejo que tiene de frente, se intenta leer, se mira, se refleja en la acción instantánea de la gasolina y el fuego.
V
Una nota sobre el escritorio.
VI
Estoy dispuesta a pasar la frontera de la lectura, aquella realidad que se mira, que se imagina sólo en la memoria del lector...

How to disappear II

He aprendido que el camino más recto es el laberinto
Christoph Hein

Un día cualquiera por la mañana sales a comprar el desayuno, vives en la periferia de la ciudad, sin duda alguna, "el homo urbanus" se ha convertido en extra urbano, te acompaña un libro que podrías empezar a imaginar como el motivo de la mañana o de los días venideros: Wakefield. Decides salir a conocer un poco más de la frontera de tu ciudad, intentas reducirte: te mueves a pie; contra todo pronóstico, caminas y piensas "no somos nadie", te das cuenta de que tu vida contiene lo esencial para ti en ese momento: un Doctor Pasavento junto al libro de Hawthorne y un repdroductor de música digital, entonces lo conviertes en tu equipaje, una especie de maleta llena de motivos y continuas por ese caos de pasos incesantes.

How to disappear I

Esta mañana la salida de sol se mostró irregular, lo que permite dar como punto de partida toda esa enramada asociación de ideas que desde la noche anterior, me llevaron a ti. He pensado como bien apunta Piglia, que la verdadera intriga se cultiva a partir de un misterio oculto. Imagino entonces la composición de una majestuosa rola:" Lonely Woman", creada por el virtuoso Ornette Coleman, mientras contemplo la fotografía en blanco y negro de un tío perdido, mientras fumo un cigarrillo, mientras el perro duerme sobre mi pie derecho, esto, que además no me deja el espacio para intentar disfrutar de la estructura de "Lonely Woman", tengo incluso la extraña sensación de que debe estar armada a partir de trecillos, lo cual hace que valga la pena prestarle atención, ese tipo de canciones tiene la posibilidad de fracturar al escucha por su tipo de acentuación; pero en realidad, no se trata de mirar microscopicamente a èsta, se trata creo, de poder imaginar el viaje de las notas en los diferentes instrumentos, las diferentes texturas que se crean y cómo pasan por el sentido del oído. Regreso la mirada al papel fotográfico en donde esta la imagen del tío extraviado, una mañana había salido, cuenta mi padre, a desayunar cerca de la casa, con una señora que preparaba almuerzos para llevar, por esos días, mi padre había olvidado, según él un libro que le había marcado sus lecturas, no lo recordaba ya, pero estaba extraviado un libro sobre un Doctor que había decidido perderse.Quisiera saber cuantas formas de extraviarse existen, uno simlpemente se pierde cuando se enamora, decía mi padre. La noche anterior me comentó al calor de las copas que "la música nos hace sentir, la lectura nos hace pensar y la vida nos hace comprender", no me aconsejaba, pero me parece que en ese micro texto se condensa la base de la experiencia; extraña relación para llegar hasta ti.